Al llegar el mes de mayo, a lo largo de todo el Camino de Santiago se celebran  multitud de romerías. Éstas tienen el objetivo de rezar y cumplir con la tradición en multitud de santuarios y ermitas.

Roncesvalles

Una de las romerías más tradicionales son las que se celebran en la Colegiata de Roncesvalles en veneración a la Virgen de Orreaga o de Roncesvalles. A ella acuden a pie los romeros procedentes de los diferentes valles, vestidos con túnicas y algunas personas descalzas en señal de penitencia. Mientras, suenan las campanas del  templo y los cantos y preces alusivos a la celebración. La estampa refleja la relación de los valles pirenaicos vecinos con la Real Colegiata de Roncesvalles y su patrona la Virgen de Orreaga.

En diferentes fechas acuden cada uno de los valles y aquellos que por su localización les toca pasar por la calle principal de Burguete. Van en doble fila, con los ramos de flores,  con la cruz  de madera en la espalda de su túnica y las cruces de plata de las parroquias. Se crea una estampa que refleja las tradiciones sobre las que se ha cimentado nuestra cultura y nuestra historia. Hay que señalar que en estas romerías también tienen su protagonismo los habitantes del lado Francés del Pirineo.

Como dato, la fecha más antigua escrita de la existencia de las romerías a Roncesvalles es de mediados del S.XIII. Aunque es de suponer que tienen mayor antigüedad.

Escultura

Por otro lado, la escultura de la Virgen de Roncesvalles es del siglo XIV. Y procede de los talleres franceses de la zona de Toulouse. Es de madera de cedro sedante, con el niño en la mano izquierda. Además, está forrada de plata toda menos los rostros y las manos. La imagen vino a sustituir a la estatua milagrosa románica del S.IX, siendo una de las tallas más bellas de Navarra.

 

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