Karol J. Wojtyla fue el primer papa que ha visitado Santiago de Compostela como peregrino y papa al mismo tiempo.
Sus dos estancias en la ciudad, en 1982 y 1989, fueron un gran éxito. Gracias a la repercusión que tuvo en todo el mundo, Santiago se convirtió en el máximo icono de las peregrinaciones cristianas.
Primera Visita
Juan Pablo II llega por primera vez a Compostela el 9 de noviembre de 1982. Lo hizo como peregrino, para impulsar el espíritu de fe y devoción que ha tenido la ruta jacobea desde la Edad Media en Europa. Allí rezó ante la urna con los restos apostólicos. Fue entonces cuando lanzó al mundo un mensaje de aliento destinado a reforzar las peregrinaciones y su importancia. Puede leerse en este enlace.
Una placa en la cripta de la catedral recuerda el momento que supuso para Santiago esta visita.
Segunda Visita
El regreso del pontifice tuvo lugar en agosto de 1989, para presidir la Jornada Mundial de la Juventud. Acompañaron al papa casi medio millón de jóvenes de todo el mundo. Esta segunda visita fue la máxima expresión de la gran promoción a nivel global que hizo Juan Pablo II a la ciudad de Santiago y a las peregrinaciones a la tumba del apóstol.
Más adelante se intentaron nuevas visitas pero, debido al diferentes causas, entre ellas el estado de salud del papa en sus últimos años, no fue posible.