Quizá los dueños de las Compostelas no lo sepan, pero la firma de D. Jaime estampa miles de ellas. Como responsable de peregrinaciones y de la Oficina del Peregrino de Santiago, asistió en primera fila a la radical modificación que el Camino ha vivido en las últimas décadas. El 25 de noviembre falleció en Santiago de Compostela a los ochenta años de edad.
Licenciado en Teología por la Universidad de Comillas, fue secretario Capitular de la Catedral de Santiago y durante más de quince años, delegado episcopal de Peregrinaciones. A él se debe la apertura de la oficina del peregrino en Santiago.
La misa de exequias se celebraron el jueves día 26 de noviembre a las 17 h en la Catedral de Santiago. Al finalizar la misa recibió sepultura en el Claustro de la Catedral de Santiago.